El irregular temporal redujo el almacenamiento de agua a nivel estatal, escasez que pone en riesgo cultivos de avena, trigo y cebada

El mal temporal de lluvias que está por terminar propicio que las presas en Querétaro estén en bajos niveles de almacenamiento, situación que pone en riesgo la cosecha de avena, trigo y cebada.

Así lo informó el secretario de Desarrollo Agropecuario del Estado, Carl Heinz Dobler, quien señaló que la falta de agua en las principales presas del estado impedirá que se cubra la proporción de cultivos que regularmente se consideran para el ciclo otoño-invierno.

En entrevista con la periodista Lucero Almanza, corresponsal del periódico El Financiero, explicó que si bien todos los cultivos de la temporada –avena, trigo y cebada – son tolerantes a las bajas temperaturas, en este 2019 las condiciones son diferentes, pues las grandes presas casi no resguardan agua.

El promedio de almacenamiento de las presas a nivel estatal está arriba del 40 %, pero hay dos en valores muy críticos: la de San Ildefonso, en la zona de Amealco, y la presa Constitución de 1917, en el municipio de San Juan del Río.

Esta última es la más importante de Querétaro y está en niveles mínimos, es decir, por debajo de 10 % de su capacidad, aseguró Heinz Dobler.

«Es muy probable que la superficie de siembra en este ciclo otoño-invierno sea muy baja porque no hay suficiente agua como para soportar el desarrollo de los cultivos», explicó el funcionario estatal.

El titular de la SEDEA comentó que normalmente se siembran entre 25 mil a 30 mil hectáreas en el ciclo otoño-invierno y con este temporal «es muy probable que nos vayamos a menos de la mitad en cuanto a cultivos y podrán sembrar solo aquellos que quieran regar con agua de pozo», señaló.

Detalló que en los próximos meses esperan condiciones de frío y la presencia de heladas en el territorio, por lo que las autoridades de la dependencia estatal preparan ya acciones y mecanismos para apoyar a los productores.

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