Con las heladas de la semana pasada, la producción de invierno de chile, tomate verde y calabacitas en Nuevo León sufrió severos daños y los agricultores estiman que el 95 por ciento de esos cultivos fueron pérdida total.
Se trata de la cosecha esperada para los meses de marzo a julio.
La Secretaría de Desarrollo Agropecuario estatal (Sedagro) detalló que los estudios a los cultivos de estas hortalizas mostraron signos de daños y deshidratación, con excepción de los repollos y cilantros.
La máxima superficie sembrada estimada para hortalizas con posible afectación es de 450 hectáreas, y agricultores dijeron que ésta representa toda la tierra sembrada en invierno.
Fermín Montes, ex delegado de la Sagarpa en Nuevo León (ahora Sader), señaló que el área de hortalizas afectadas representa el 95 por ciento de la siembra de invierno.
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